El aceite de romero estimula la circulación propiciando el crecimiento, fortaleciendo las raíces y mejorando la estructura capilar del pelo fino y quebradizo. Favorece la oxigenación de los folículos pilosos del cuero cabelludo frenando la caída. Además, aporta brillo y nutrición.

Alto contenido en vitaminas B, C y E, minerales esenciales y carnosol o ácido carnosólico.

Reduce la grasa

Es astringente, por lo que contribuye a equilibrar la producción de grasa para que el cuero cabelludo produzca solo lo que necesita para mantenerse sano y nutrido.

El romero favorece también la actividad de los melanocitos, que son las células encargadas de la pigmentación del cabello. De esta forma, contribuye a retrasar la aparición de las canas al fortalecer el color en cabellos castaños y oscuros.